Roberto Santiago 13 junio, 2022 | Hace 2 años
En un informe reciente del Congreso de Estados Unidos que se titula “México: Crimen Organizado y narcotráfico», elaborado por el Servicio de Investigación, se demuestra que ha sido fallida la estrategia “abrazos, no balazos” del presidente Andrés Manuel López Obrador
Al ya haber superado la mitad del camino del sexenio, el presidente se comprometió a hacer de México una sociedad más justa y pacífica con su estrategia “abrazos, no balazos”, por lo que su administración ha evitado operativos a gran escala contra los cárteles y la cooperación entre Estados Unidos y México en la materia ha disminuido en niveles no vistos desde hace 15 años, lo que apuntan a una amenaza continua de los grupos criminales para ambos países.
López Obrador, al llegar al poder, expresó que no iba a emprender una guerra contra el narcotráfico, sino que atendería las condiciones sociales que permiten a los grupos criminales prosperar.
Sin embargo, esa estrategia que resumió como “abrazos, no balazos”, no ha debilitado efectivamente a los grupos criminales.
El informe señala que después de tres años en el cargo, López Obrador ha evitado acciones policiales a gran escala contra los cárteles, mientras que continuó con la estrategia de seguridad militarizada de las dos administraciones anteriores, ello al autorizar a las Fuerzas Armadas mexicanas a realizar tareas de seguridad durante el resto de su mandato.