Enrique Aranda 14 agosto, 2022 | Hace 2 años

Desborda violencia al gobierno… 

Que vengan técnicos extranjeros, clamor en El Pinabete…

Esta semana que termina, entre la tarde-noche del miércoles y el sábado, una decena de ciudades de cuatro entidades del norte y centro del país pudieron comprobar, otra vez, la probada inutilidad de la fallida estrategia oficial de “abrazos, no balazos” para revertir la violencia criminal e inseguridad y, más aún, la evidente incapacidad o ¿indisposición?, del gobierno para garantizar mínimos de seguridad a la población civil.

Tras la supuesta detención de Ricardo El RR Ruiz Velazco, operador del Cártel Jalisco Nueva Generación en el Occidente y Bajío, en efecto, miembros de la agrupación atacaron con bombas molotov y prendieron fuego a unidades de transporte público y autos privados, distribuidoras de combustible, tiendas de conveniencia y hasta farmacias, tanto en Zapopan, Jalisco, como en León, Irapuato, Celaya y Guanajuato capital, donde, incluso, el número de muertos y lesionados sigue siendo una incógnita, igual que el de sicarios detenidos.

Horas después, aunque en este caso tras una pelea entre integrantes de cárteles al interior del penal, Ciudad Juárez en Chihuahua, fue escenario de enfrentamientos y balaceras con un saldo de diez muertos, cuatro trabajadores de la empresa Switch Mega Radio —el locutor Allan González que dejaba las instalaciones entre ellos— más una veintena de lesionados.

Los hechos se repitieron un día después en Baja California —Tecate, Ensenada, Tijuana y Mexicali— y, en Guanajuato, de nueva cuenta, donde el bloqueo de vialidades y la quema de unidades de transporte público y autobuses tiende a normalizarse, al mismo tiempo que se agrava la violencia y se acrecienta la inseguridad.

Grave, es verdad, pero más la aparente indiferencia del gobierno federal y autoridades estatales que, amén de insistir en el recurrente e inaceptable argumento de que los hechos tienen su explicación en el pasado y le son ajenos, no ha hecho prácticamente nada para enfrentar los hechos y garantizar, insistamos, mínimos de paz a la ciudadanía.

¿Hasta dónde quiere llegar la autoridad?, ¿hasta cuándo es que la población civil deberá vivir la incertidumbre de la inseguridad, a merced de la violencia criminal de los cárteles? ¿O, es que en verdad existe un acuerdo tácito o implícito de la autoridad para no actuar contra ellos?…

ASTERISCOS

* Reveladora, aunque a nadie sorprende ya, la decisión del gobierno de abstenerse de votar la resolución condenatoria que, contra la dictadura asesina de Daniel Ortega y Rosario Murillo, impresentable ambos, emitió este viernes la OEA, del “odiado” Luis Almagro, por los ataques, sacrílegos algunos, contra jerarcas y templos católicos de Nicaragua. Pura hipocresía oficial…

* En el marco de su gestión próxima a concluir, el expriista Carlos Joaquín recibió un reconocimiento más de empresarios que, entre otras cosas, destacaron que el caribe fue uno de los primeros cinco destinos en recibir el Sello de Seguridad Safe Travel, del Consejo Mundial de Viajes y Turismo, resultado de aplicar protocolos y estándares de higiene y sanitización. Bien…

Veámonos mañana, con otro asunto De naturaleza política.

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