Enrique Aranda 2 noviembre, 2022 | Hace 2 años
Uno imputa mientras el otro exonera. ¡Sólo es show!
¿Qué tan grave puede ser el riesgo de destrucción de la aún incipiente democracia participativa o de pérdida de libertades para los mexicanos que están viendo venir que, de manera por demás inusual, el pleno de la jerarquía católica, algo más de un centenar de obispos y cardenales agrupados en la Conferencia del Episcopado, aceptó signar un documento para advertir sobre ello? Pues, digámoslo claro, no existen en la historia moderna del país muchos antecedentes sobre algo de tal contundencia…
Y es que, al margen de consideraciones de otra índole, pocas veces, como ayer lunes, la Iglesia en cuanto tal asumió, sin cortapisas, la frontal defensa (política) de un organismo del Estado, cual es el caso del Instituto Nacional Electoral (INE) y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), cuya extinción-suplantación por una entidad impuesta por el “populismo” gobernante, o la limitación de sus actuales atribuciones, aspira concretar el gobierno de la 4T por instrucciones de Andrés Manuel López Obrador, su incuestionable gurú.
La abierta imputación de regresiva que a la reforma promovida desde lo más alto del poder se hace y el explícito señalamiento de que ningún gobernante que prometió hacer guardar la Constitución tiene derecho a impulsar iniciativas como la que se menciona, pues, dice, “la sola pretensión de hacerlo pone en entredicho la calidad moral de quienes la impulsan”, molestó a más de uno en las periferias del promotor non, de él mismo.
Ayer, pues, como era de esperarse, en el marco de sus cada vez más insulsas prédicas mañaneras, el tabasqueño salió al paso de la crítica y, cuidadoso en extremo, explicó que respetaba la misma, aunque no la compartía y, para que no quedara duda, aprovechó la ocasión para “presumir” que mantiene una buena relación con la Iglesia católica, mas no con las (sus) élites y sí, en cambio —fiel a su tradicional e infundada cantaleta—, con “el papa Francisco (que) es otra cosa, un verdadero cristiano (que) está a favor de los desposeídos (y) no tiene nada que ver con las élites”.
No deberán ir lejos López Obrador y afines para constatar la validez de la conseja de don Quijote a su fiel escudero: “Con la Iglesia hemos topado, Sancho”…
ASTERISCOS
* En el que no pocos calificaron como su postrer llamado a cejar la persecución de que —¿con aval de Palacio?— es objeto, el senador Ricardo Monreal estableció que, “por dignidad, no puedes mantenerte en un lugar donde se te acosa y persigue…”, y expuso que si bien no tiene previsto contender como independiente u opositor en 2024, sí podría verse obligado a considerar dejar las filas de Morena. Ufff…
* Más tardó en confirmarse el estrecho triunfo de Luiz Inácio Lula da Silva que éste, en conjunto con los gobiernos de Argentina y presuntamente de México, anunciar la presentación de una solicitud para posponer a enero de 2023 la elección del sucesor del trumpista Mauricio Claver al frente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), prevista para el 20 de noviembre próximo en la que, a contrapelo de Estados Unidos, puja la morenista Alicia Bárcena…
Veámonos el viernes con otro asunto De naturaleza política.