RAMÓN ZURITA SAHAGÚN 23 febrero, 2023 | Hace 2 años
Algo que se critica a la oposición de Morena es la carencia de prospectos que puedan enfrentar en las urnas, en igualdad de condiciones a cualquiera de las “corcholatas” con las que cuenta el Movimiento de Regeneración Nacional.
Si a eso se le agrega que varios de los aspirantes que han alzado la mano, para pasar lista de presentes, cuentan con acusaciones de diversas índoles, por la que son investigados o hasta denunciados ante autoridades varias, se verá que resultará difícil conformar un candidato o candidata con el ímpetu necesario para aguantar la embestida desde el poder.
Es difícil que los partidos que conforman la alianza Va por México encuentren al candidato idóneo que pueda llegar a mover las fibras sentimentales de los votantes y convenza a esos ciudadanos de sufragar en su favor.
Hasta el momento son racimos de personajes que manifiestan su intención de competir dentro de sus partidos o presentarse como la opción necesaria de esa gran alianza que integrarán panistas, priistas y perredistas.
Nombres se mencionan muchos, algunos que son considerados por los partidos en que militan y otros que, simplemente, creyeron contar con las aptitudes necesarias para encabezar dicha alianza.
Panistas y priistas realizaron unos rounds de sombra, abrieron sus sedes, para mostrar a un selecto grupo que hicieron su presentación como aspirantes presidenciales.
De esa manera, la baraja presidencial fue creciendo, aunque en realidad hay varios personajes que, simplemente, no cuentan con posibilidad alguna de convertirse en el candidato presidencial y explorar si caben dentro de la alianza.
De los que fueron convocados por el PAN la baraja va quedándose corta y, por ahora, solamente Lilly Téllez, Santiago Creel y Mauricio Vila, se mantienen vigentes y sosteniendo sus posibilidades.
Por el lado de los priistas Beatriz Paredes se mueve un poco, Claudia Ruiz Salinas decidió incursionar en las redes sociales, Enrique de la Madrid redobla su entusiasmo, José Ángel Gurría, desapareció del escenario, Ildefonso Guajardo se cobija en Nuevo León y Alejandro Murat, simplemente no aparece. Queda Alfredo Del Mazo a la espera de ver si el resultado de los comicios en el Estado de México lo posiciona como aspirante o, por el contrario, la derrota lo hunde.
Llama la atención que dentro de estos grupos de aspirantes se encuentran algunos personajes que han estado o están bajo la lupa de las autoridades y que con todo y ello se manifiestan como una esperanza para los aliancistas.
Alfredo Ramírez Bedolla, gobernador de Michoacán, manifestó que su antecesor en el cargo y prospectos presidencial del PRD, enfrentará cargos, ya que la ASF le encontró al gobierno de Silvano Aureoles un boquete de 12 mil millones de pesos. Cabe destacar que Aureoles se encuentra al frente de una caravana procedente de Michoacán, rumbo a la CDMX, para participar en la concentración del próximo en el Zócalo capitalino.
Pero si Silvano se encuentra bajo la lupa, Miguel Ángel Mancera lo está desde hace algún tiempo y algunos de sus colaboradores se encuentran detenidos.
Otro más que aspira a la nominación presidencial y que enfrenta líos con la justicia es Ricardo Anaya, quien ni siquiera puede pisar suelo nacional, ante el riesgo de ser detenido.
Contando con aspirantes investigados por supuestos actos de corrupción y con otros que no cuentan con atributos suficientes para hacer una buena oferta electoral, los partidos de la alianza deberán darse a la tarea de encontrar un hombre o una mujer que despierta la dormida conciencia de los ciudadanos.