RAMÓN ZURITA SAHAGÚN 7 febrero, 2023 | Hace 2 años
Son muchos los que se cuestionan acerca de los partidos de oposición y si acaso estos tiraron la toalla antes de iniciar la contienda presidencial.
Y es que eso parece, ya que mientras el partido gobernante tiene sus “corcholatas”, las muestra, las placea y les da el suficiente espacio para ganar adeptos, los opositores se encuentran enfrascados en diversas batallas.
Es cierto que antes de la elección presidencial tienen que pasar la aduana de Coahuila y el Estado de México y eso puede marcar un nuevo derrotero, hundiendo a la oposición o dándole un salvavidas con el que puedan flotar rumbo a 2024.
La oportunidad se encuentra a la mano, pero los partidos opositores a Morena no dan muestra de entrar a la contienda presidencial y si de estar inmersos en asuntos internos de sus partidos.
Adán Augusto López, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y hasta Ricardo Monreal han crecido en la intención de voto, mientras los aspirantes panistas, priistas y perredistas no despegan y de mostrarse ante los ciudadanos como prospectos de sus partidos, simplemente se apagaron y desaparecieron del espectro político.
Poco se sabe de Beatriz Paredes, Enrique de la Madrid, José Ángel Gurría, Ildefonso Guajardo y hasta del pretencioso Alejandro Murat que aseguró que iniciaría un recorrido nacional al dejar el gobierno de Oaxaca y dos meses después parece escondido ante los posibles reclamos del nuevo gobierno de Salomón Jara.
Los panistas se muestran un poco más, ya que Santiago Creel tiene la presidencia de la Cámara de Diputados, lo que le permite una mayor exposición, Lilly Téllez aprovecha el Senado para destilar todo el veneno que requiere contra la 4T y, especialmente, contra el presidente López Obrador. Ricardo Anaya saca la mano para anunciar un recorrido por Estados Unidos en busca de afiliaciones a su partido y Mauricio Vila sigue disfrutando de su informe de gobierno para intentar placearse.
Los perredistas tienen sus dos prospectos, aunque no convencen a nadie de los logros de Miguel Ángel Mancera y Silvano Aureoles, muy lejanos de la posibilidad de competir por la Presidencia de la República.
Movimiento Ciudadanos se rige al vaivén de los deseos de Dante Delgado que amaga y recula. Busca aliados. Crea grupos y pronto se le desvanecen y piensa seriamente proponer su propio candidato para negociar lo más conveniente.
Sin embargo, el principal problema es que los opositores de Morena saben que para aspirar a ganar tendrían que presentar un frente común, es decir una alianza o coalición y para el 24 se antoja harto difícil que lo hagan.
En la actualidad, se encuentran sumidos en su propia problemática. Los perredistas exigiendo un trato parejo en la alianza, aunque su aportación sea mínima. Sus dos prospectos ni siquiera son avalados por la dirigencia nacional que quería pasarle factura a Mancera y al hermano de Silvano (Antonio García Conejo) por el voto favorable a la militarización. Silvano ni siquiera era considerado como aspirante por el PRD, con todo y que tenía varios meses en plena precampaña.
Los priistas viven su propio infierno con las diferencias entre Miguel Osorio y Alejandro Moreno y la displicencia del ex secretario de Gobernación, así como el manejo de sus cuatro senadores. En el PAN surgieron alertas por el respaldo de Marko Cortés al periplo de Ricardo Anaya por Estados Unidos.
Y es que pareciera que la oposición con sus conflictos parece rendir la plaza antes de iniciar la batalla por el voto ciudadano con miras a los comicios presidenciales.
La ciudadanía se encuentra muy desconcertada con la actitud de algunos de esos partidos.
*****
Terrible el sismo que sacudió a Turquía y parte de Siria, con más de tres mil muertos. Los que hemos vivido fenómenos similares en México sabemos de las consecuencias de terremotos como el de 1985 y el de 2017, principalmente.