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°CIván Soto 29 junio, 2022 | Hace 2 años
La compleja realidad económica que vive Durango no cambiará como por arte de magia con la salida de José Aispuro Torres y la llegada de Esteban Villegas Villarreal al frente del Gobierno del Estado.
La razón es simple: el estancamiento que vive la economía duranguense lleva varios años y es un estatus que no cambiará de la noche a la mañana, ni por decreto, ni como resultado de un acto milagroso.
Casi siempre los que piensan así en algún momento terminan por darse cuenta que se equivocan, ya que quieren vibrar en el optimismo ciego y extremo, pero pierden de vista que es una meta cuesta arriba hacer repuntar una economía tan deficiente y débil como es la de Durango.
“El desarrollo del estado debe venir de la mano del sector de la industrial y la transformación”, dicen muchos, como si fuera tan simple lograr de un día para otro la atracción de una o varias inversiones de tipo industrial en pleno 2022, con el entorno mundial tan recesivo e invadido por tantas y tantas especulaciones.
Sin embargo, una apuesta más efectiva y con resultados en el corto y mediano plazos podría ser la promoción turística de Durango, en una gran apuesta donde caben varios sectores productivos, comerciales y de servicios.
Visto desde esa perspectiva, cobra mayor relevancia el perfil y la visión de los equipos que habrá de formar Esteban Villegas en el ámbito estatal, en estrecha alianza con los esfuerzos que hagan los gobiernos municipales con mayor vocación al rubro del turismo y los servicios.
Y es que, en su equipo cercano hay gente que tiene pasión y domina el tema, tal es el caso de Elisa Haro, a quien ya he mencionado en otras columnas como una de las cartas más fuertes para encabezar Secretaría de Turismo.
También estaba el caso de Eleazar Gamboa, actual titular de la dependencia desde hace cuatro años, sin embargo, su posible continuidad al frente fue sepultada con la declaración de Esteban en días pasados, en el sentido de que nadie del actual gobierno de Aispuro repetirá en ninguna de las áreas.
Sin embargo, Villegas ha dicho que también echará mano de la sociedad civil, de perfiles que sin pertenecer directamente a la campaña o a algún partido político, podrían involucrarse a tareas públicas a partir del 15 de septiembre.
Y es ahí donde se abre el abanico de participación para gente que ha demostrado también pasión y cariño por la promoción del turismo, pero con un ingrediente interesante: hacerlo sin haber estado en la nómina pública.
Nombres hay varios. Por ejemplo el empresario Javier Mayagoitia, quien lleva tres o cuatro años muy metido en la atracción de eventos que le han dado realce turístico a Durango, y lo ha hecho más como promotor privado que en calidad de funcionario. Lo cual tiene su mérito.
Ha sido parte fundamental para que se lleve a cabo en Durango el Globo Fest, el Sky Fest, el Zeppelin Tours, la Fiesta Papalote, el Mezcal celebrante, los Tablajeros Grill y algunas otras actividades que han ayudado a Durango a estar en el radar de públicos especializados de visitantes.
El de Mayagoitia es solo un ejemplo que refuerza la idea con la que termino: Esteban Villegas, en cada área tendrá gente afín de la campaña, amigos y cercanos de ésta y otras épocas, aportes de los partidos que lo llevaron al poder, pero también propuestas de sociedad civil que pudieran necesitar tan solo una oportunidad para dar resultados.
La decisión final del equipo la hará el propio gobernante. Lo importante es que quien llegue a Turismo sepa que en sus manos tiene la oportunidad de que se apalanque la primera etapa de promoción económica de Durango, mientras da resultados la atracción de esas grandes inversiones que podrían ayudarnos a salir del estancamiento en el que nos dejará el sexenio que ya se va.
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